Esta sustancia es una lejía industrial muy oxidante, corrosiva, blanqueante y biocida. ¿De verdad que usted quiere bebérselo?
De verdad, no lo haga.
Es una molécula muy sencilla que se compone de un átomo de cloro que forma dos enlaces covalentes con sendos átomos de oxígeno.
Es muy soluble en agua, hasta 8 g/L a 20ºC. Por debajo de -59ºC forma cristales, y por encima de 11ºC pasa a estado gaseoso. Su densidad (en estado gaseoso) es superior a la del aire, lo cual quiere decir que se puede acumular en zonas bajas o en el fondo de recipientes, como el CO2
En altas presiones o en concentraciones de más del 10% en el aire, puede explotar y descomponerse en cloro y oxígeno.
Destrucción de las membranas celulares
A pesar de que es muy popular la afirmación de que las células humanas se oxidan a partir de 1,3V, eso es parcialmente cierto. La membrana celular lo tiene en solo 0,08V, y eso es mucho menos que el potencial de reducción del dióxido de cloro, que anda por los 1,3V.
Así que ponerlo en contacto con las mucosas digestivas no parece, a priori, buena idea.
Adios, eritrocitos, adios, glóbulos rojos
Parece ser que los glóbulos rojos, los encargados de transportar el oxígeno a las células de todo el cuerpo, son bastantes susceptibles a los efectos del dióxido de cloro. ¿Qué les pasa? Que por efecto de la oxidación, se rompen.
No acaba ahí la cosa, también pueden producirse daños severos en la hemoglobina. Esta es la molécula a la que se une el oxígeno para ser transportado por la sangre. Al dañarse, el oxígeno no se puede ligar y no es transportado.
En resumen, en ambos casos, se produce una hipoxia muy difícil de revertir, incluso en un hospital y con bombona de oxígeno. La sangre no puede llevar suficiente oxígeno a los órganos del cuerpo.
Daños en el cerebro, hígado, corazón...
Sí, se han descrito ensayos con animales en los que se ve un retraso en el desarrollo del cerebro. También se conocen fallos hepáticos en niños torturados con dióxido de cloro. Y, para dejarlo aquí pero no por último, el ritmo cardíaco también se ve afectado, con los peligros para la vida que esto conlleva.
Por eso, en los envases de dióxido de cloro deben ir obligatoriamente estos avisos:
El dióxido de cloro no es lejía
Sí y no. Es cierto que no es la lejía de uso doméstico. Es que al ser muy tóxico, se restringe al ámbito industrial. Para casa tenemos el hipoclorito de sodio, al que normalmente llamamos lejía a secas, y que es menos venenoso en caso de ingestión. Vale, que es cierto que nadie se va a poner a beber lejía si tiene dos dedos de frente, ¿verdad?, pero siempre puede haber algún consumo por accidente (bebés, ese compañero de piso que guarda la lejía en una botella de agua...)
En química, una lejía se define por su carácter muy oxidante. De ello resulta que es un producto químico corrosivo, con efecto blanqueante (el dióxido de cloro se usa para blanquear papel) y biocida. Esto es, mata bien muerto lo que está vivo.
El dióxido de cloro libera oxígeno allá donde no llega la sangre
Aquí tenemos que decir que esto es totalmente falso. Hacen falta algunos conocimientos de química, pero no a un nivel muy avanzado. Recordemos que la molécula ClO2 dijimos que tiene enlaces covalentes. La podríamos pintar O=Cl=O. Estos enlaces son del tipo más fuerte que existe en química, y no se separan espontáneamente ni por efecto de ser disueltos en agua, como sí ocurriría con los enlaces iónicos (los de la sal común, por ejemplo).
Repito: el dióxido de cloro NO oxigena. ¿O ustedes se imaginan a los buceadores bebiendo dióxido de cloro para aguantar más?
El dióxido de cloro oxida selectivamente solo a los patógenos
No. Ni aunque escribamos su nombre con mayúsculas, como si fuera objeto de veneración, va a tener inteligencia o mecanismos físicos para oxidar selectivamente. Ya hemos visto que lo del potencial de reducción no es cierto.
¿Y el glutatión? Es un antioxidante que protege del daño oxidativo, y posiblemente en dosis bajas de dióxido de cloro sea capaz de neutralizarlo. Ahora bien, ni los niveles de glutation son los mismos en todas las personas y en todo momento, ni proviene de una fuente inagotable. Según se reduzcan sus niveles en el cuerpo, pueden aparecer a la larga enfermedades neurodegenerativas, cáncer...
El dióxido de cloro se usa para desinfectar la sangre / las bolsas de sangre donada
No. Cuando surgió la epidemia de VIH, se consideró su uso, pero en virtud de que le tiene manía a los eritrocitos, se desechó. Hoy en día se usan otras sustancias más seguras.
El dióxido de cloro cura... [ponga su enfermedad o dolencia favorita]
No. Es más, NO. De momento solo se sabe que es peligroso beberlo, ponérselo en un enema, inhalarlo o inyectárselo (regla sencila: no juntar partes del interior del cuerpo con el dióxido de cloro). Para poder decir que cura, hay que aportar estudios médicos de calidad. Para poder hacer estudios y ensayos, hay que demostrar que es seguro y que hay una forma de actuación plausible (no, no vale decir que somos "piscinas" o "baterías" o inventarse reacciones químicas). Hay que hacer pruebas in-vitro, in-vivo... Hay que someterse a un comité de ética, hay que tener seguros contratados para hacer frente a las eventualidades que puedan ocurrir a los pacientes...
Si suena complicado, es que lo es. Lo más importante es que sin evidencias sólidas, no se puede decir que ingerir dióxido de cloro tenga ningún beneficio para las personas.
Las patentes del dióxido de cloro
Dice el conocido charlatán Andreas Kalcker que tiene varias patentes y que las regala al mundo, magnánimo que es él. Veamos más de cerca qué dice que regala.
Patente # WO2018185347A1 - Pharmaceutical composition for the treatment of internal inflammations - Google Patents
Una sencilla búsqueda en internet nos revela enseguida que efectivamente, su centro fantasma de investigación SZWFIE solicitó esta patente en Suiza en 2017. Sin embargo, su estado actual es archivada. No se la han concedido, así que vale lo que vale el papel en el que está impresa.
Patente # WO2018185347A1 - Para el tratamiento de inflamaciones internas
Le pasa lo mismo. A lo mejor Kalcker no sabe bien cómo funcionan las patentes, o le han informado mal, o vete a saber.
Es peor saber que una patente no presupone efectividad. Sirve solo para proteger una invención, pero no otorga mágicamente las propiedades que reclama. Ha habido solicitudes de patentes para máquinas de movimiento perpetuo. ¿Quiere decir eso que las leyes de la termodinámica están mal? Claro que no.